Entre gritos y lamentos se escucha la catrina en el patio de la escuela
¡Hay mis hijos! con desgarrador grito
La profesora la escucho
¡Oye catrina ya no des lata!
Ten una calaverita de dulce y nata y ya vete para tu casa.
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En cada alborada la profesora fumaba un cigarro
Un día un catrín llego ¡Me regalas uno! La profesora alegre le convido
Ella no sabía que el catrín no fumaba y que era la muerte
¡Maestra, hoy es el día de tu velorio!
pero no te preocupes, termina tu cigarrito.
que de ahi vas directo para el hoyo.
De: Martha Daniela
—
Va el director con una sonrisa en la cara
Pidiendo posada al que más se dejara
La calavera al verlo rondar por la escuela se apiado y posada le dio
Todavía no te iba llevar pero ya que insistes
Conmigo a la tumba te iras.
¡Todavía no canten victoria niños!
¡Que de mí no se podrán librar!
De: Gustavo Alonso
