Aunque aún no era noviembre, la calavera ya su lista apuntaba
Y sus costales preparaba.
nadie se lo imaginaba que pronto por sus casas pasaba
La muerte es muy precavida todo el año anda asechando
Pues no le gusta las apuraciones y tampoco los malos ratos.
Ya en su lista están los nombres más relevantes del año.
Algunos son mexicanos y uno que otro extranjero.
El primero en su lista está un señor muy odiado por los mexicanos
No se puede Decir su Nombre pues es muy influyente
Después siguen los más latosos de este México querido.
Pues sobre advertencia no hay engaño dijo la flaca
cuando redactaba unas breves palabras.
—
Noviembre estaba a la puerta
Nadie lo imaginaria, pues don Rogelio ya olía a tierra del cementerio
No es por echar la mala suerte, pero la muerte andaba cerca
Por ahí se decía que venía enfurecida a ver qué hombre se llevaría
Más nunca dijo nombres pero si algunas señales.
Noviembre se acerca y pronto con su carreta la muerte llegaría.
—
Me rio de quien quiero,
Me llevo al que se atraviese
No distingo niños y mujeres
No se sientan privilegiados los que están adinerados
Porque a todos me llevo parejo de un solo viaje.
Atte. La muerte
– Todos a la catrina le temían
nadie quiere salir de su guarida
con mucho miedo la veían
ella solo reía.
– A una joven guapa de Guadalajara
la parca la miraba
su inteligencia la asombraba
¿Quien la ha visto? ¿quién sabe en donde está?
díganle que se va conmigo
a mi casa a descansar
– Con mucha delicadeza escribo esta prosa
al final del camino se pueden ver sus sobras
de quienes un día estuvieron y se fueron
ya llego el día su visita se aproxima
flores de cempasúchil adornaran las casas
pues en cada una de esas una visita esperan.
– Que la fiesta empiece, que la fiesta no pare
decía la muerte cuando sus huesos movía
¡este es mi día! ella decía
nadie me moleste,
hoy quiero reír todo el día
